Rosa Díez exige una ley electoral que acabe con las "normas franquistas"

Diéz ha reprochado al Gobierno que no haya dado un solo paso para modificar la ley electoral, nueve meses después de que el Consejo de Estado emitiera el informe con las propuestas. Para Díez la explicación está clara:"PP y PSOE se benefician injustamente de esta ley, basada en normas franquistas".

La diputada y líder de UpyD ha pedido al presidente del Gobierno en la Sesión de control, que aborde definitivamente la modificación del régimen electoral que lleva proclamando desde su campaña electoral.

Ha recordado que desde Febrero de este año, casi nueve meses, el Ejecutivo tiene en su poder el informe del Consejo de Estado con las propuestas de modificación, que el Gobierno ha aparcado para evitar hacer frente a una reforma que le perjudica claramente. "Es un sistema injusto y obsoleto, basado en normas franquistas, y ya es hora de que se piense en los ciudadanos en lugar de en los territorios" le ha dicho a Zapatero.

Díez ha insistido en una de las reivindicaciones principales de UpyD, que los votos tengan el mismo valor en toda España "independientemente de la comunidad en la que se viva", hecho que Zapatero ha negado sin demasiada convicción. El presidente ha dicho que "Deswde el punto de vista de los efectos, depende del coto de los ciudadnos", expresando su opinión de que la ley electoral no es que sea "una injusticia histórica"como le reprocha Díez, sino un "sistema con tradición".

La diputada de UpyD ha culpado directametne al PP y al PSOE de la paralización de la reforma del régimen electoral, porque "son los principales beneficiados, son los que más se benefician injustamente de esta ley electoral". De hecho, lo que más demuestra que no tienen previsto abordar ninguna modificación, según Díez "Es que ahora ya tienen el informe del Consejo de Estado, y ahora crean una Comisión pero no para abordar la reforma, sino para que duerma el sueño de los justos".

Zapatero ha rehúsado de nuevo enfrentearse a las críticas de su gestión. Se ha respaldado en que "Nuestro sistema electoral es un sistema homologable a los sistemas de las democracias con más tradición", y para reformarlo es necesario "un amplio consenso".

LD